Si me preguntan, soy la chica que se acurrucará en el sillón y verá películas/series hasta que me ardan los ojos, pero también tengo un pequeño porcentaje que le gusta ir al teatro. He ido pocas veces este año, fui a ver a Piaf, luego a un par de obras pequeñas y ayer estuve en el estreno de Salir, y me dejó un par de cosas para pensar.
Es increíble como un escenario con 5 banquitas, y la misma cantidad de personajes puede alterar tanto tus pensamientos, y hacer que te cuestiones varios puntos en tu vida. Daniel Amaru (Escritor y Director) y Rodrigo Chávez (Co-director) plantean una obra de un solo acto, donde juegan con diferentes tiempos de la historia del mismo personaje: Alonso, interpretado por el grandísimo Carlos Mesta.
No quiero contar toda la historia, lo bonito del teatro es que aunque no lo puedes poner en replay en la compu, puedes guardar en tu memoria y en tu corazón, esos momentos impactantes, que te dejaron sin aliento y con ganas de más. Aquí te pongo las frases que más me marcaron, y cómo lo voy entendiendo.
Prometo no buscarte, eso sí lo voy a cumplir.
El dejar ir a alguien, es probablemente una de las cosas más difíciles de hacer, sobretodo si tienes años de historia, y experiencias enlazadas en cada punto de tu vida, pero Salir enseña lo fuerte de una promesa.
Es imposible borrarla de mis registros.
Si bien dejar a alguien puede volverse fácil si te esfuerzas, borrarla de tu memoria y de tus recuerdos es prácticamente imposible. No pierdas tiempo intentando eliminar las partes de tu historia que fueron marcadas por esa persona, aprécialas, son tuyas.
No sería interesante que alguien se quede.
Alonso escribe sobre su vida, y todos sus libros tienen un final abierto, y alguien yéndose, porque aceptémoslo, cuando la persona se va, le agrega el drama necesario a nuestras vidas, y escribir sobre alguien que se queda, es muy parecido a Disney.
– Yo no te he hecho nada.
– Tú me has hecho a mi.
Créeme, cuando escuches esta frase en Salir, se te va a escarapelar la piel, es un intercambio de palabras entre Alonso y su madre (interpretada por Alexa Centurión), relata un caso común, y lamentable, en las familias peruanas, cuando uno de los padres se rinde y decide irse de casa.
Buscar ser felices no es ser egoístas, sino honestos.
La búsqueda de la felicidad es algo por lo que el humano pierde el sueño. Dejar de lado tu propia felicidad por hacer feliz a otro es la peor decisión que podrías tomar, y te estarías mintiendo. Ver Salir me hizo confirmar que las decisiones tomadas en torno a mi felicidad fueron las mejores de este 2015.
Si quieres saber porque necesitas una moneda para Salir, puedes comprar tus entradas en Teleticket o en la boletería de la Alianza Francesa. Están hasta el 14 de diciembre.