Llevo cerca de un año escribiendo artículos de teatro para La Escultural, aún así fue en un proyecto personal que pude ver a Macla por primera vez en un escenario protagonizando la obra Una historia de amor israelí.
Me enamoré y me dejó boquiabierta de cómo manejó el escenario en un unipersonal de más de una hora de duración sin titubear ni equivocarse – al menos no ante el ojo del espectador – así que cuando me enteré que habría una segunda temporada por el mes de la amistad entre Israel y Perú, no pude más y le envié un mensaje para entrevistarla, y aceptó. ACEPTÓ.

«Desde chiquita me dicen Macla»
Estamos sentadas en las escaleras del Teatro de la Cámara del Centro Cultural El Olivar. Le he entregado un pequeño regalo y veo sus ojos brillar en agradecimiento, seamos honestos, mientras escribo estas líneas, aún alucino con su presentación.
Maria Claudia tiene 22 años, es menor que yo y ya se está comiendo el mundo artístico mientras tú estás sentado en tu casa – como yo – viendo Netflix y comiendo comida chatarra. Macla bailó un tiempo en la compañía de Maricielo Effio, a quien considera como una madre, luego de 3 años le sale una oportunidad de protagonizar Anastasia en el Pirandello.
En el 2012 mientras hacía Anastasia, pasa el casting de La chica de la torre de Marfil con Sergio Galliani, paralelo graba Avenida Perú y le sale una película dirigida por Jesús Alvarez. «y al toque otra obra de niños, un cuento de cuentos y luego me salió Loco cielo de abril», y así, apasionada como te imaginas a Macla, me lo cuenta todo.
Continua contándome que está esperando que se estrene El túnel de la muerte, una película con Oscar Lopez Arias, y ahora también se presenta con La Odisea en La Plaza.
«Estoy profundamente enamorada del texto, profundamente enamorada de hacer la obra»
Este interesante proyecto comenzó cuando Gonzalo Tuesta, el director, le mandó un mensaje diciéndole sobre este unipersonal. «Nos reunimos en mi casa y a las dos semanas estábamos aceptando el reto de caminar juntos en esto». Es un unipersonal de 20 hojas, aproximadamente una hora y media de duración.
Mi gran pregunta es cuán difícil es el reto de armar un unipersonal, mi teoría era – y Macla me lo confirmó – que cuando en una obra hay varios actores, es como un ping pong entonces se ayudan a recordar los textos, pero cuando estás sola en el escenario, con 20 hojas de texto memorizado, la historia cambia.
La rutina de preparación es lenta, no en el sentido de pesado, como me lo explica Macla, sino porque es algo en lo que hay que trabajar a diario. Primero se reunía con Gonzalo de lunes a viernes 4 horas diarias, luego invadiría hasta sus fines de semana en el último mes antes del estreno. Las reuniones pueden ser para investigar, para enamorarse más de la obra, o pelearse con la idea de la misma. Habían ensayos donde no hacían nada. «Es un proceso de altos y bajos» me lo resume esta bella actriz.
«Oblígate a leer, no vas a hablar de algo que no conoces»
Macla juega este rol importante en la Israel antigua, donde el conflicto con Palestina es tanto o más fresco que ahora. Sobre el conflicto siempre alguien tiene algo que decir, pero a Macla como a mi nos gusta leer e informarnos – mucho de los haters no saben qué es eso – Resulta que desde el colegio ella ha querido viajar a Israel, quizá en la línea de su vida, Israel estaba destinada a cruzarsele, primero en una obra, quizá más adelante en un viaje.

«Si hay algo que rescato de ella es cómo amó, como sigue amando, como tuvo el valor de amar tan profundamente a Eli»
Margalit, el personal estrella interpretado por Macla, es la clásica mujer que vive enamorada del amor, que se sentirá realizada al casarse y formar una familia y eso, no tiene nada de malo #RelajénseFeministas. Mientras que Macla, está en una etapa de su vida de enamorarse del trabajo, de ella misma, de crecer como persona y como profesional.
Esta obra no ha hecho más que traerle felicidad a Macla, desde la comunidad judía yendo a casi todas las funciones, hasta el embajador de Israel en Perú quien le dijo: «que había visto Israel en mis ojos, que me agradecía por haberle traído un pedazo de Israel acá».
¿Qué sigue para Macla? Que la inviten con su maleta para todo lado y en paralelo comenzar a grabar una nueva novela para el próximo año. Y sobre todo, seguir conquistando tablas aquí y en todo escenario posible.